Una herramienta que se utilizó durante generaciones debería seguir utilizándose hoy
Hoy en día, la mayoría de las personas pasan su tiempo libre con sus dispositivos electrónicos, pero hace apenas unas décadas,
muchos pasábamos el tiempo creando cosas en el taller de carpintería. Quizás recuerdes haber estado con tu abuelo mientras lo veías crear algo.
Estar en el taller de carpintería significaba que trabajabas con tus manos y podías ver un beneficio inmediato por el arduo trabajo que le dedicabas.
Todo, las vistas, los sonidos e incluso los olores nos dejaban saber que estábamos conectando de una manera muy personal.
También había ciertas herramientas que se usaban con regularidad en esa época y que hoy en día no se usan con tanta frecuencia. Si creciste en los años 80 o antes, esos proyectos de carpintería solían unirse con clavos.
Por eso, una de las herramientas que se utilizaba habitualmente para esa ocasión era el sacaclavos.
Se trata de una herramienta pequeña y puntiaguda que empujaba la cabeza del clavo por debajo de la superficie. Permitía un acabado suave después de rellenar un pequeño orificio.